Que tus padres no hayan sido lo que pensaste en tu infancia, que tu papa o mama se haya ido de la casa dejándote con un vacío en el corazón, que tu novio o novia te haya repetido mil veces “te quiero” “ te amo” sin embargo un día empezó a ser una persona desconocida que te abandonó, que esa persona que tanto admirabas y confiabas te hizo algo que daño algo en tu corazón, aquella ocasión que tus sueños e ilusiones se derrumbaron por una mala actitud de alguien que te conocía… Son razones comunes y repetitivas en nuestras vidas que nos hacen llenar el corazón de odio, rencor, desconfianza y falta de perdón. Esto nos trae cautividad, inseguridad y nos mantiene presos en mascaras. Máscaras de “todo está bien”, “mejor estoy solo o sola”, “los otros siempre fallan”, “esa persona no merece nada”, “así es la vida que se puede hacer”, “estoy dedicado a mis cosas y no tengo tiempo para nada más”, “soy independiente”, “prefiero vivir así como estoy porque me siento mejor”… son también respuestas muy comunes de una persona que guarda en su corazón falta de perdón.
La pregunta es esta: ¿Para qué perdonar?
La respuesta es esta: Porque te haces daño y necesitas ser libre de odios, rencores y pesos emocionales que has guardado a lo largo de tu vida.
Es difícil perdonar! Esa es la realidad… Es fácil escribir en un mail diciendo perdona… Pero muy difícil llevarlo a la práctica…
Yo he tenido que perdonar a mis padres, a mi mejor amigo, a personas que sentí que me fallaron, a esa persona que le entregue mi corazón y lo destrozo, a mí mismo e incluso a Dios porque sentí que me había estafado por ciertos eventos que pase en mi vida. Pero la realidad es que cuando aprendes a perdonar… el sentimiento es tan liberador que no se puede describir es una real forma de vivir libre y tus pensamientos hacia la vida cambian, dejas de vivir sin presiones, sin desconfianza, sin máscaras y empiezas a tener una vida realmente que vale la pena.
En la vida tendrás que afrontar una y otra vez situaciones donde necesitaras perdonar, por eso es importante hacerlo, puede que tengas 15, 10, 30 o 60 años sin embargo seguirás estando en situaciones donde vas a ser herido.
La libertad no es subirte a tu auto y salir a comprar con una tarjeta de crédito lo que tus deseos momentáneos dictan…. Libertad no es empacar tus maletas y salir a un destino envidiado por otros y que tu ego sienta que eres afortunado… Libertad no es salir en la noche en busca de diversiones desmedidas o reuniones con tus amistades para olvidar tu triste realidad que no puedes cambiar…. La verdadera libertad está en lo grande que es perdonar y ser perdonado!
Busca perdonar a esa persona que te hirió, busca resolver todo eso que llevas dentro de ti porque es un veneno que poco a poco va calando tu vida… No existe el “ya estoy curtido”, “ya me acostumbre”, “ahora ya no me afecta”, “en algún momento me dolió pero luego desapareció”, “algo dentro de mi murió después de eso”… creo que todas las personas que conozco lo repiten una y otra vez como un mantra en sus vidas para no sentirse vulnerables!
Busca perdonar y serás verdaderamente libre.
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